Con el paso del tiempo y la transformación de los hábitos, la aparición y multiplicación de enfermedades se ha incrementado considerablemente en las últimas décadas.
El cáncer es uno de los males que ha presentado mayores mutaciones y apariciones en los últimos años, mientras al mismo tiempo se ha descubierto que con atención y cuidados preventivos el riesgo de desarrollarlo puede controlarse.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) algunas acciones diarias como las siguientes pueden reducir el riesgo: - Atención a la alimentación:
Se recomienda vigilar el consumo de alimentos altos en calorías, carnes procesadas y bebidas azucaradas, y promover el consumo de vegetales, cereales, frutas y legumbres.
- Control del peso:
Es importante acudir al médico en busca de un equilibrio en este sentido. - Actividad física por encima de quietud:
Preferir las escaleras en vez del ascensor, o caminar a la hora del almuerzo, son pequeños esfuerzos que a la larga hacen la diferencia.
- Protección solar:
Sin importar la temporada del año usar filtro solar es un factor fundamental para la prevención.
- Regular el consumo de alcohol:
Evitar excesos.
- Tener al día las vacunas:
La edad no es un pretexto para evitar estar al día en vacunas que pueden salvarnos la vida, tal es el caso de las vacunas contra el virus del papiloma humano y la hepatitis B.
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