3,5 millones de niños menores de
5 años mueren anualmente por enfermedades que pueden evitarse con una sencilla
práctica como el lavado de manos.
La falta de acceso al agua es uno de los factores decisivos. |
Enfermedades como la diarrea, intoxicaciones alimentarias, y la neumonía
terminan anticipadamente con las vidas de estos niños que al acercar sus manos
a su cara, boca o nariz, estando contaminadas, desconocen que están expuestos a
miles de bacterias que trasmiten
desprevenidamente con el contacto con otros elementos o personas.
Se habla mucho del tema pero aún
es poca la conciencia de por qué es
importante esta práctica…
¿Para qué lavarse las manos?
Como se mencionó antes el
contagio de enfermedades a través del contacto es muy común aún, el comportamiento de los niños lleno de
curiosidad hace que se lleven las manos a la nariz, o rostro en general, y
también que continuamente exploren objetos y superficies a través del contacto.
Por ejemplo un niño o cualquier
persona enferma de gripa sino se lava con frecuencia las manos irá esparciendo
los gérmenes sobre las personas y cosas que toque, por eso es importante
lavarse: porque todos esos microbios pueden eliminarse con un buen lavado de
manos.
¿Cómo es el correcto lavado de manos?
No se requiere de mucho
conocimiento pero sí de mucho cuidado, no basta con mojarse las manos
rápidamente también hace falta tener en cuenta algunas claves:
- Mojar las manos, idealmente con agua tibia para eliminar microorganismos.
- Añadir jabón a las palmas de las manos y frotar sin olvidar el dorso de la mano, las muñecas y los espacios entre los dedos.
- Friccionar los lados de ambas manos y enjuagar también las uñas.
- Eliminar con agua todo el jabón y secarse con una toalla de papel o una toalla limpia para no perder el proceso que se acaba de realizar.
Observa esta imagen donde se explica minuciosamente el proceso:
Un buen lavado de las manos toma cerca de 30 segundos. / Imagen: www.hogarutil.com |
¿Cuándo es oportuno lavarse las manos?
- Todas las personas deben lavarse después de haber ido al baño
- Antes y después de comer y también de visitar a una persona enferma.
- Después de tocar animales, así sean las mascotas.
- Después de haber jugado al aire libre.
- Cuando estemos enfermos cada vez que estornudemos o haya tos.
- Y lógicamente cada que nos ensuciemos las manos.
Toma en cuenta estos consejos, enséñaselos a tu familia, y ayuda a que disminuyan las alarmantes cifras de muertes por un simple "descuido".